Trabajo
Sucedió el viernes pasado, y como ya llevo unos días sin poder dejar de darle vueltas, lo voy a contar aquí, a ver si me sirve como exorcizante.
Recibí una llamada cerca de las ocho de la tarde, una llamada 'profesional'. Tenían un curriculum mío y querían hacerme una entrevista para un puesto de técnico especialista. De ser posible, esa misma tarde/noche.
Me preguntaron si manejaba cierto programa y les confirmé que era experta en ese tipo de aplicaciones.
Dado lo inoportuno de la hora quise averiguar algunos puntos antes de concertar definitivamente la entrevista, para asegurarme que había una oportunidad real de llegar a un acuerdo.
De esta manera, después de descartarles la posibilidad de estar trabajando para ellos como autónoma, fue cuando me dijeron que el horario sería de 45 horas semanales. Diez, de lunes a jueves; cinco, el viernes por la mañana.
Me pareció un horario extenso y así lo manifesté. En mi situación, aceptar un horario tal, es una decisión a meditar con calma. Supongo que las dudas se traslucieron en mi voz.
Mi entrevistador me dio entonces un último dato: El sueldo sería de 800 euros al mes.